AVISO IMPORTANTE

¡BIENVENIDOS AL NUEVO PORTAL GUILLERMOBARBA.COM!

Estimados lectores de Inteligencia Financiera Global: Este blog se ha mudado definitivamente al nuevo portal de GuillermoBarba.com . Agr...

Mostrando entradas con la etiqueta Fekete backwardation. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Fekete backwardation. Mostrar todas las entradas

domingo, 6 de julio de 2014

REPORTE CONTANGO: ¿HACIA DÓNDE VAN EL ORO Y LA PLATA?




En este espacio damos seguimiento puntual al comportamiento de dos indicadores exclusivos de la Nueva Escuela Austríaca de Economía, que sirven para el análisis de los mercados de metales preciosos monetarios, oro y plata. A diferencia de un análisis técnico tradicional, el de la Base y la Cobase de ambos nos permite anticipar tanto posibles movimientos de precio en el corto y mediano plazos como algo mucho más importante: inferir el flujo de metal físico hacia el mercado o hacia fuera de la circulación.

Esto es relevante porque, como aquí hemos informado, la dirección de esos flujos está siendo de Occidente a Oriente –China e India en primero y segundo lugar, como un síntoma más del cambio de poderes entre ambos hemisferios.

En la actualización de julio, destaca que gracias al rally (alza) que ha observado el oro desde hace un mes a la fecha, hay una abundante oferta de metal que está entrando al mercado para ser vendido. Esto nos lo dice la situación de amplio Contango que vemos en sus gráficas de Base y Cobase. Ello contrasta con las lecturas observadas por ejemplo en la segunda mitad de mayo cuando las cotizaciones tendieron a la baja, y en consecuencia se disparó  lo contrario al contango, la Backwardation.

Como recordatorio, la Base es el resultado de restar del precio del contrato de futuro activo (o sea el próximo), el precio “spot” actual (es decir, al contado). Dado que la normalidad es que los futuros sean más caros que el precio al contado, la diferencia debe ser positiva. Esto es, hay Contango y la curva de los precios de futuros es ascendente. Pero si el resultado obtenido es negativo, muestra una inversión en dicha curva para el o los contratos de futuros más cercanos llamada Backwardation, o sea, hay una curva descendente.

A la inversa, la Cobase se calcula restando del precio “spot” (precio actual al contado) el del contrato de futuro más cercano (activo). Por eso se está en Contango cuando el resultado es negativo, y en Backwardation cuando hay Cobase positiva. Esta última situación, reiteramos, se presentó recientemente en mayo/junio al caer los precios del oro.

Sin embargo, la tendencia alcista que fue retomada a partir del 6 de junio, fue reduciendo de forma considerable la Cobase positiva, para de hecho, salir disparada hacia terreno negativo y confirmar un amplio Contango. La gráfica siguiente (cortesía de Sandeep Jaitly de Feketeresearch.com) nos lo deja ver al corte del viernes pasado. Las líneas azules representan la Base y las rojas la Cobase para los contratos de agosto (el activo) y diciembre (en líneas discontinuas).



En Inteligencia Financiera Global hemos explicado que la Backwardation es un síntoma de “escasez” de oro físico en el mercado, que la experiencia nos dice que se dispara cuando los precios caen.  Esto se debe a que los tenedores de oro se vuelven reticentes a ofrecerlo a la venta a bajas cotizaciones, y aquellos pocos que sí lo hacen, exigen que se les pague un “premio” adicional al contado sobre el precio de entrega a futuro, que de este modo se vuelve más barato. Los inversionistas de “manos fuertes”, son los que están dispuestos a pagar ese sobreprecio con tal de hacerse del metal noble.

Como ve, la “escasez” de oro constituye una anomalía, pues aunque en la naturaleza sí es escaso, las existencias sobre la Tierra siempre son abundantes. Y es que para fines prácticos, debido al valor que le otorgan las personas, casi todo el que se ha extraído sigue con nosotros en alguna forma o en otra.

En estos momentos con una Cobase en terreno muy negativo, existe Contango y por tanto, hay una buena cantidad de oro entrando de nuevo a la circulación. Esto nos habla de que las “manos débiles” y/o especuladores, es decir, aquellos que esperan obtener una ganancia en divisa por comprar barato y vender más caro en el corto plazo, todavía son muchos con respecto a las “manos fuertes”. Estos últimos son el tipo de inversor que atesora oro y plata de largo plazo, se protege así de un inevitable colapso económico-monetario y claro, no venderá sus tenencias ni siquiera a precios más altos. La razón es que son su “póliza” contra desastres financieros y no se deshará de ella, del mismo modo que nadie vendería su bote salvavidas en un barco que naufraga en alta mar, así le pagaran mucho por él.

Como podrá entenderse, es previsible que las presiones bajistas en los precios del oro y la plata continúen por ahora ante la abundancia de metal a la venta. No obstante, el continuo vaivén Contango/Backwardation propicia que en cada baja de precios, las “manos fuertes” –sobre todo asiáticas– saquen paulatinamente el metal precioso de la circulación. Así nos dirigimos hacia un momento en el que cada vez será más difícil regresar a Contango, la Backwardation se vuelva permanente y entonces, las promesas de entrega de oro en el papel se vuelvan incumplibles.

Por todo lo anterior, queda claro el seguimiento de la Base y la Cobase es más relevante que el simple precio en dólares. Quien los ignore, comete un grave error.

viernes, 7 de marzo de 2014

ORO Y PLATA SALEN DE BACKWARDATION ¿POR QUÉ?




En la actualización de febrero le comentamos que el fenómeno conocido como backwardation, se mantenía en el oro pero que se había disparado en la plata, debido a lo bajo de sus precios. Esto la convertía en una opción preferible a la del oro, que desde inicios de 2014 ha vivido un rally (alza) que llevó su precio de 1,225 dólares a los niveles actuales alrededor de 1,350 dólares la onza troy. La plata en el mismo período ha tenido también un comportamiento positivo, pero menos vigoroso.

Como mero recordatorio, en los metales preciosos monetarios hay backwardation cuando el precio al contado (spot) del metal, es superior al del contrato de futuros más cercanos.

Esta condición que suele ser “normal” y temporal en otras materias primas, no lo es en el oro y la plata. Y es que si la backwardation nos dice que hay cierta escasez de una mercancía determinada, eso no tendría por qué presentarse en estos metales, pues ambos son las commodities con los ratios existencias/flujo más altos de todas.

En otras palabras, siempre habrá inventarios físicos disponibles en el mercado, pues por su valor –que les dio históricamente el rol de dinero en el mercado, son atesorados en su totalidad como el oro, o bien de manera parcial como la plata. Cabe explicar que al ser un metal industrial además de monetario, una parte de la producción de plata sí es consumida y por tanto, “desaparece” de los inventarios existentes.

¿Por qué hay entonces escasez/backwardation en ellos? Solo puede deberse a una cosa: la relativa reticencia de sus tenedores a venderlo, sea por razones de precio bajo o porque consideran que desprenderse de sus metales preciosos los deja sin la protección financiera que brindan.

Como hemos explicado en este espacio, en la Nueva Escuela Austríaca de Economía sostenemos las teorías del Prof. Antal Fekete, en el sentido de que el oro y la plata tienden a una situación única en su tipo de backwardation permanente. Antes de que ésta sea definitiva, oscilarán por períodos entre backwardation y contango (su opuesto).

Lo que esto quiere decir es que los dos están en un proceso de salida de la circulación hacia lo que se denomina “manos fuertes”: inversores que no están dispuestos a soltar sus lingotes, barras o monedas de metal fino casi a ningún precio, pues lo guardan como refugio seguro ante lo que perciben como un inevitable colapso del sistema universal de dinero irredimible (fíat). En el camino, sobre todo al subir los precios, “manos débiles” y especuladores venderán, y con más oferta física, se saldrá de backwardation. No obstante, la tendencia se retomará.

Por eso cada día se suman nuevas bóvedas privadas sobre todo en Asia, que sirven como custodias de grandes tesoros de inversionistas de todas latitudes, y que prefieren no tenerlo más en Occidente, donde se quedarán con sus montañas de deudas, trillones de billetes y “oro” papel. Lo mismo explica por qué China es ya el mayor consumidor de oro del planeta, y por qué Shanghai habrá de sustituir en el futuro a Londres como la capital global de este mercado: están anticipando este cambio de era donde jugarán el rol protagónico, gracias al oro.

En esta actualización al corte de marzo, justo le informo que ante el rally del oro ya no está en backwardation.

Los indicadores que nos permiten medir la intensidad de esta condición son la Base y la Cobase. Estos miden de diferente manera la relación que guarda el precio spot con el de futuros. En términos simplificados, la Cobase se obtiene restándole al precio spot (al contado), el precio del futuro. La Base, restándole al precio del futuro, el spot.

De esta forma cuando tenemos Cobase positiva (línea roja), estamos en backwardation. Como lo muestra el gráfico siguiente (cortesía de Sandeep Jaitly de Feketeresearch.com), esto ya no es así para el contrato de oro activo (abril).



Asimismo, la más moderada subida del precio de la plata la mantiene en un nivel bajo de backwardation para el contrato de marzo, pero no así para el de mayo, que es ahora el contrato activo.


Lo que esto podría indicarnos es que en el corto plazo, las cotizaciones en dólares podrían caer de manera importante. De presentarse esta baja, volveríamos a la backwardation muy pronto. Si no, de cualquier manera regresaremos a ella, pues las “manos débiles” que ahora abastecen el mercado físico son finitas, y las fuertes, reiteramos, no estarán dispuestas a enajenarlo ni aun a precios más altos.

¿Cómo se comportará el mercado? Muy pronto lo veremos.