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Hace dos años, Banco de México
(Banxico) saltó al escenario de los bancos centrales que, desde 2009, se
convirtieron en compradores netos de oro
para diversificar sus reservas, fuera de las típicas divisas consideradas como
tal: el dólar estadounidense, el euro, el yen, etc.
Esto, al realizar una histórica
compra de 100 toneladas del metal,
en los primeros cuatro meses de 2011.
Dicha adquisición se hizo de una
manera tan discreta, sin anuncios ni comunicado alguno de parte del Instituto
Central, que parecía como si quisiera que nadie lo notase. En su momento, en
este blog criticamos esa actitud del Banxico, al tiempo que reconocimos que se
trataba de una de los pocas decisiones acertadas que había tomado, desde el
inicio de la crisis global en 2008.
Más tarde sin embargo, gracias a
Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, pudimos
revelar aquí en 2012 que gran parte de ese mérito quedaba diluido, pues casi el
total del oro que se supone forma parte de los activos de Reserva del Banxico (alrededor
de 125 toneladas), es mexicano solo
en el papel: más del 94% está en
Londres, Inglaterra; 1% en Estados Unidos y menos del 5% en territorio nacional.
Hoy por desgracia, le traemos otra
pésima noticia: Banco de México por razones que debería explicar, acumula ya cuando
menos ocho meses vendiendo nuestro oro.
Esto según su propio Reporte sobre
las Reservas Internacionales y la Liquidez en Moneda Extranjera, disponible en
su portal de internet. Los datos ofrecidos a la fecha son a diciembre de 2012,
lo que nos hace pensar en la probabilidad de que también en enero pasado, se
pueda sumar un mes más de continuas ventas.
El saldo negativo acumulado en el periodo
mayo-diciembre de 2012, es de cerca de 32 mil onzas troy, que a un
precio promedio de 1,662.90 dólares por unidad (Londres PM Fix), nos da un
total de 53.2 millones de dólares, aproximadamente.
Aunque puede parecer “poco” relevante
el deshacerse de 32 mil onzas, llama la atención que ese número es casi el
equivalente exacto de una tonelada de oro: 32,150.74 onzas. ¿Por qué y para qué
elegir vender una tonelada en particular? La respuesta preocupa.
Y es que ese dato “menor”, cobra
relevancia al plantearnos otra pregunta: ¿el
metal vendido era parte de los pocos lingotes que se tienen en México, o de los
que se supone están en el extranjero?
No podemos soslayar que de acuerdo al
Banxico, de los 4.035 millones de onzas que se tenían en Reservas al mes de abril
de 2012, “únicamente 194,539 onzas se ubicaban en territorio de los
Estados Unidos Mexicanos.” Énfasis agregado.
En el caso de que el Banco Central
hubiese vendido lingotes que se encontraban en sus bóvedas, estaríamos hablando
que en cuestión de ocho meses, se habría
deshecho de más del 16 por ciento del oro que tenía en sus manos. Una locura.
Sea ese el caso o no, en este espacio
le he expresado que lo peor de la crisis aún está por venir, cuando la
inevitable recaída se presente para empujar a la economía global hacia una
nueva recesión.
Imagen: Silverbearcafe |
De ahí que la permanencia de los “estímulos”
monetarios de otros bancos centrales, los más influyentes del mundo, como la
Reserva Federal de Estados Unidos, el de Banco de Inglaterra y el de Japón, por
ejemplo, esté más que garantizada.
Esto significa que su compromiso por
devaluar sus monedas, en lo que se conoce como “guerra de divisas”, implicará que
otros Bancos e inversionistas de todos los niveles sigan buscando el refugio de
valor que es el oro, para protegerse.
Lejos de dejar ir un activo de tal
valía, Banco de México debería continuar
con agresivas compras de lingotes, como las que se atrevió a hacer hace un
par de años. Esperemos que enmiende su error.
Eso sí, demandando su entrega física.
Alemania y Venezuela ya nos pusieron el ejemplo.
No olvidemos que en el ranking del Consejo
Mundial del Oro (WGC, por sus siglas en inglés), estamos en la posición 29 con apenas
el 4% de nuestras reservas en dicho metal.
La estrategia de Banxico de seguir
acumulando solo dólares, probará en unos años haber sido equivocada, pues se
sabe que la intención de nuestros vecinos del Norte es devaluarlos para ganar “competitividad”.
Ante ello, el Dr. Agustín Carstens
debería retomar de una vez por todas, un liderazgo real que nos lleve, como en
el cuento, por el seguro “camino
amarillo” del oro, en vez del “camino verde” que, como todos los de su tipo,
termina en el panteón de la historia del dinero ficticio.
Seguro que cuando se dieron cuenta (o les hicieron entrar en razón) que compraron Oro de Papel, se pusieron a vender esa basura por un instrumento más líquido.
ResponderEliminarEfectivamente Banxico debería ponerse a comprar lingotes a mineras mexicanas.
Hombre!, el oro se compró para venderlo ahora que el esquema de supresión de precios esta en su apogeo y si es papel oro lo que se compró, mejor para el esquema...triste que nos prestemos como cómplices...
ResponderEliminarSUGERENCIAS CABALLEROS...
ResponderEliminarSALUDOS.
PD.: QUÉ ME RECOMIENDAN HACER CON EL DINERITO QUE TENGO: POR CUÁL DE LOS 2 CAMINOS SIGO (EL AMARILLO O EL VERDE....). AGRADEZCO SINCERAMENTE SU(S) COMENTARIO(S). SEGURAMENTE SU(S) EXPERIENCIAS PUEDEN AYUDARME (NOS). MIL GRACIAS. HASTA PRONTO Y SALUDOS.
AMGD.
Como saber si las onzas de plata u oro son falsas? hace algunos pocos años mi aubela compro onzas de plata y 5 centenarios, y los fue a vender en el mismo lugar donde los compro que es Banamex y le dijeron que le habian dado plata y oro de mala calidad y ella dijo que ahi mismo lo habia comprado y despues de una discusion se lo tuvieron que comprar... como sabemos si es de buena o mala calidad la plata y el oro?
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