Columna Invitada: PESOS
Y CONTRAPESOS
En el último Pesos y Contrapesos pregunté por qué, en materia de crecimiento, la
economía mexicana no reacciona, por qué no logra, de manera sostenida, mayores
tasas de crecimiento a las conseguidas en los últimos años: 2.1 por ciento,
promedio anual, del 2001 al 2014, y pregunté si ello se deberá a la falta de
ánimo e impulso de la iniciativa privada o al exceso de lastres y obstáculos
del gobierno o, tercera posibilidad, a una combinación de ambas.
Para encontrar la respuesta hay que
tener presente que el crecimiento se mide por el comportamiento de la
producción de bienes y servicios, que depende de las inversiones directas, que
son las que abren empresas, producen bienes y servicios, crean empleos, y les
permiten, a quienes consiguen esos puestos de trabajo, generar ingresos,
inversiones directas que a su vez dependen de la competitividad del país, es
decir, de la ausencia (elevada competitividad) o presencia (baja
competitividad) de lastres y obstáculos impuestos por el gobierno a la acción
empresarial: producir, distribuir, publicitar, ofrecer y vender, todo lo cual
se sintetiza en dos palabras: emprender e invertir, lastres y obstáculos que
afectan el ánimo y el dinamismo de la iniciativa privada, de cuyas inversiones
directas depende, principalmente, la producción de bienes y servicios y, por ello,
el crecimiento de la economía.
Caso que ayuda a responder la pregunta
es el de Uber, consecuencia de la acción empresarial de la iniciativa privada,
que tiene como fin brindarle un mejor servicio al consumidor, aumentando la
cantidad y calidad de la oferta de transporte terrestre,
y ante el cual el gobierno cae en la tentación de prohibirlo (caso del Estado
de México) o de licenciarlo y reglamentarlo (caso de la Ciudad de México), todo
lo cual supone imponer lastres y obstáculos a la producción de bienes y
servicios, frenos y trabas que afectan el ánimo y el impulso de la iniciativa
privada, de cuyas inversiones directas depende el crecimiento de la economía.
El caso Uber, ¿es excepción o regla?
Twitter: @ArturoDammarnal
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